
No voy a intentar convencer a nadie de que el anime sigue siendo algo de nicho. En palabras de uno de los mejores personajes animados del pasado 2021: «¡Claro que he visto Akira, el anime es supermainstream hoy en día!». Aun así, es cierto que sigue cargando con una enorme mochila de prejuicios por parte de sus potenciales espectadores occidentales, además de alguna que otra brecha cultural difícilmente salvable.
En este contexto, a veces las ganas de adentrarnos en un nuevo territorio pueden quedar colapsadas por un mercado, códigos y nombres que nos son del todo ajenos. Es por eso que hoy, con motivo del estreno de la sexta temporada de My Hero Academia (Yōsuke Kuroda, 2016-), en Milana recomendamos esta serie a cualquiera que esté mínimamente interesado en el anime y no sepa por dónde empezar.
No se trata solo de que My Hero Academia sea un excelente anime de acción y aventuras superheroicas, sino que además supone una puerta de entrada muy accesible a la animación japonesa. Todas las razones que me hacen pensar esto, a continuación. Esta recomendación está, como cabría esperar, libre de spoilers.
Un punto de partida familiar
¡Sorpresa! Más superhéroes. Es verdad que los tenemos hasta en la sopa de todas la maneras posibles: cómic, cine, series… Diría que solo nos queda por ver alguna comedia musical si no fuera por la mejor escena poscréditos que nos ha dado la Marvel Studios actual. Si aún no te ha saturado tanta gente embutida en mallas, déjame decirte: enhorabuena. My Hero Academia es una de las tres series que, para mí, mejor juegan la carta de los superhéroes (junto a The Boys e Invencible, por si te lo preguntabas).

All Might, héroe de la esperanza, en una imagen promocional de My Hero Academia
A través de Izuku Midoriya, un adolescente sin poderes fanático de los superhéroes, My Hero Academia nos presenta un mundo parecido a los que estamos acostumbrados, pero lo suficientemente distinto para resultar novedoso. Cuando Midoriya conoce a All Might, el mayor héroe del mundo, este le cede sus poderes para que pueda cumplir su sueño: unirse a la UA, la mejor escuela de superhéroes del mundo. Por si fuera poco, los poderes de casi todos los personajes están muy inspirados, quitando un poco de regusto a “esto ya lo he visto”.
La clásica batalla entre el bien y el mal cobra distintos matices y derroteros en el mundo que plantea My Hero Academia. ¿Qué pasa cuando la mayoría de personas tienen superpoderes? ¿Cómo actúa una agencia de héroes sometida a la regulación gubernamental? ¿Qué papel juegan los aspirantes a héroe cuando una organización de supercriminales aterroriza las calles?
Así se ponen las piezas en el tablero, y la profundidad del mundo de My Hero Academia se va desvelando poco a poco. Mientras los aspirantes de la UA descubren qué clase de héroes quieren ser, los héroes profesionales deben hacer frente a fantasmas del pasado que amenazan con volver aún más fuertes.
Loca academia de supercolegas

Imagen promocional de My Hero Academia
Pero al final, ¿qué importa la premisa o el universo de una serie si nos dan igual sus personajes? Afortunadamente, este es uno de los apartados que hacen de My Hero Academia un anime sobresaliente.
Si Midoriya es un buen protagonista, es por su determinación a conseguir sus objetivos sin dejar a nadie atrás. Sus miedos son una parte intrínseca de por qué hace lo que hace, y por qué confía en All Might y sus compañeros por encima de todo. La dinámica que se establece desde el primer capítulo entre Midoriya y All Might es una de las mejores relaciones mentor-aprendiz que recuerdo en la ficción.
Afortunadamente, lo que ofrece My Hero Academia no se reduce a un buen protagonista. Los alumnos de 1ºA en la UA son grandes personajes a los que es difícil no querer. Cada uno tiene sus aspiraciones, miedos y rasgos que los hacen únicos e inconfundibles. Pero lo brillante de cómo maneja este anime sus personajes no se queda ahí: además de resultar interesantes por separado, cuando trabajan juntos es casi imposible quitar los ojos de la pantalla.
Que lo mejor de la aventura son los amigos que hacemos por el camino ya nos lo han contado muchas series antes. Pero eso no quita que sea entretenidísimo ver cómo este grupo de supercolegas hacen el tonto, comparten sueños y se entrenan para convertirse en las mejores versiones de sí mismos.
Un anime accesible

Fotograma de My Hero Academia
Si has leído hasta aquí, es que My Hero Academia debe contar ya con un poquito de tu interés. Puede que ese punto no sea el más importante, pero puede que te ayude a lanzarte definitivamente a apuntarte a la academia UA. Hablo, por supuesto, de lo fácil que es ver esta serie.
En general, los shonen (manganimes de acción, aventuras, superhéroes…) son accesibles. No suelen empezar con mucha complicación y la aventura, si está bien hecha, es más que suficiente para mantenernos entretenidos. En el caso de My Hero Academia, además, la narración es ágil. Al contrario que otros casos, los capítulos no se ven constantemente interrumpidos por flashbacks innecesarios (que los hay) para llenar tiempo. Lo normal es que My Hero Academia vaya al grano, adaptando el manga en que se basa sin dar muchos rodeos y manteniendo un buen ritmo de forma constante.
Podrían decirse muchas más cosas buenas sobre My Hero Academia, como sus increíbles escenas de acción, su sentido del humor y su fantástico doblaje al castellano. Sin embargo, espero que podáis descubrirlas por vosotros mismos. Ahora que acaba de estrenarse la 6ª temporada, capítulos no os van a faltar. ¡Smash!
¿Dónde puedes ver My Hero Academia?
Puedes ver My Hero Academia en Crunchyroll